Vivo a cinco minutos de carril, y esto andando. Disfruto de estas maravillosas almejas cada poco y en distintas recetas, aunque como más me gustan es así, a la marinera. Creo que hay ingredientes que aunque se cocinen de mil formas diferentes y por mucho innovar en la cocina ya tienen una receta que es la ideal, como ocurre con el pulpo por ejemplo, que me lo den de mil formas preparado, con arroz, en empanada, en ensalada... si, está rico pero como "á feira" para mi no hay, y si es en una romería en Galicia, hecho por una pulpeira en un gran caldero de cobre, donde se cuecen 20 pulpos juntos, en plato de madera, sal gorda, pimentón, aceite de oliva y un palillo de los de toda la vida para pinchar, unido con una buena bolla de pan y una taza de vino tinto... Esto sabe a gloria bendita...¿o no?
Para mi ocurre exactamente lo mismo con las almejas, la marinera es la mejor opción y la receta ideal para saborear estas exquisitas piezas, que me las trajeron a casa recién cogidas en un caldero con agua de mar (todo un lujo eh). Las dejé toda la noche así para que soltasen las posibles arenas que pudiesen tener.
He comido almejas en restaurantes de mucho postín, en restaurantes cutres, en casas de amigos, en bodas, en un sinfín de sitios en los que me han gustado mucho, en los que no me han gustado nada y en otros que me han dejado totalmente indiferente, pero las mejores almejas y la mejor receta que he probado, es la de mi madre. Los que me conocéis, sabéis muy bien de lo que hablo. Así que, aquí os traigo su receta, que por supuesto, guardaré como oro en paño...
Ingredientes:
- Aceite de oliva
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 2 hojas de laurel
- perejil
- 1/2 tomate
- 1/2 pimiento rojo
- Azafrán
- Una pastilla de avecrem
- Un vaso de vino blanco
- Agua
- Sal
- Pimentón dulce
- Pimentón picante
- Una cucharada de harina
- 1kg de almejas
Preparación:
Ponemos una tartera al fuego con un fondo de aceite de oliva. Picamos la cebolla, los ajos, el pimiento y el perejil muy picadito y lo añadimos a la tartera a pochar. Pasado el tiempo añadimos el tomate rallado y removemos. A continuación añadimos 1/2 cucharadita de pimentón dulce y una puntita del picante, damos unas vueltas, añadimos las almejas y tapamos para que abran.
Una vez abiertas añadimos el vaso de vino blanco, el laurel y tapamos de nuevo. Preparamos una taza de agua en la que diluimos la pastilla de caldo, el azafrán y la cucharada de harina, removemos bien y añadimos esta preparación a las almejas, mientras agitamos la tartera.
Probamos de sal, dejamos dos minutos para que "engorde" un poquito la salsa y servimos.