Bombas fritas

La última vez que le vi, allá por finales de la semana pasada, emitía un extraño sonido y se comportaba de forma totalmente anormal. Lo llevé al "médico" y el diagnóstico no dejaba lugar a dudas, la cosa era grave. No tanto como para no poder hace nada por él pero sí para que el parche que le van a hacer ahora tan solo me de algo de tiempo para ahorrar para otro. Mi ordenador viene anunciando el final de una larga vida en la que ha recibido caricias y algún que otro golpe... Así que aquí estoy, viviendo virutalmente de la caridad ajena y dando gracias por haber dejado subidas estas fotografías, tener el post en borradores y poder tener receta esta semana. No era esta la que tocaba, hubiese preferido una salada, pero tendrá que esperar a tiempos mejores.

Las bombas fritas tuvieron su época de éxito en mi pueblo cuando yo era adolescente. Todas las mañanas me comía una en el descanso en el insti y me rechiflaban!!!! Por aquel entonces yo ni me imaginaba haciendo bollería casera y eso que ya cocinaba un montón de cosas, pero esto no. La bollería es para mí una de las preparaciones más satisfactorias, el resultado es mejor que el de las pastelerías y si no me creéis, probad a hacer, por poneros un ejemplo, los deliciosos bollos suizos, veréis como tengo razón.

Vayamos con la receta...

Ingredientes:

• 120g de leche entera
• Medio cubo de levadura fresca de panadería (Unos 12g)
• 2 huevos medianos
• 40g de azúcar
• 400g de harina
• 4g de sal
• 80g de mantequilla a punto pomada

Además:

• Crema pastelera express
• Azúcar
• Canela

Preparación:

Deshacemos la levadura en la leche y colocamos el resto de los ingredientes (Excepto la mantequilla) en el orden mencionado en la cubeta de nuestra panificadora. Seleccionamos el programa que solo amasa (en mi caso el número 7 que tiene una duración de 15 minutos) Una vez terminado ponemos la mantequilla en trozos pequeños y seleccionamos el programa para amasar de nuevo. Colocamos la masa en un amplio recipiente untado de aceite y la tapamos con papel film hasta que aumente el doble su volumen. Transcurrido el tiempo, espolvoreamos la mesa de harina y extendemos la masa con ayuda de un rodillo dejándola de un grosor de 1cm más aproximadamente. Cortamos formas circulares del tamaño deseado, las tapamos con un paño y las dejamos levar de nuevo hasta que aumenten el doble su volumen. Freímos en aceite caliente dándoles vuelta para dorar por ambos lados. Escurrir bien sobre un papel abosorvente de cocina y rebozar en azúcar con canela. Una vez frías, hacemos una pequeña incisión en algún punto de la bomba e introducimos la crema pastelera que tendremos en una manga con boquilla de relleno o similar. Servir.

Notas:

Son unos bocados deliciosos, esto os va a gustar mucho mucho.

La leche mejor si la ponéis tibia. Se activará antes la levadura.

La mantequilla a punto pomada, es eso mismo, mantequilla con esa textura, es decir, muy blandita.

La masa es "pesada" está muy enriquecida y es de las que le cuesta subir, así que paciencia.

Yo hago la masa de noche, la tapo y dejo que haga el primer levado a temperatura ambiente (ahora en invierno la temperatura es fresca) y a la mañana siguiente prosigo con la receta. La crema pastelera también la dejo lista la noche anterior y la guardo en la nevera. De este modo a la mañana siguiente tan solo doy forma, espero el levado y me pongo a freír, rellenar y listo.

Si no tenéis panificadora ni amasadora y queréis hacer la receta a mano, colocáis la harina y el resto de los ingredientes secos en la mesa de trabajo en forma de volcán. Deshacéis la levadura en la leche tibia y la colocáis en el centro junto con los huevos. Comenzáis a amasar y cuando casi se hayan unido los ingredientes añadís la mantequilla en trozos amasando bien hasta integrarla por completo y obtener una bola de masa lisa y elástica. A partir de este punto procedéis del mismo modo con la receta.

Rebozar las bombas en el azúcar estando aún calientes para que éste se adhiera bien.

Salen un montón, así que si sois pocos con la mitad de la receta tendréis más que suficiente.

Rellenar solo las que vayáis a consumir. El resto podéis congelarlas.

Yo tampoco tengo boquilla de relleno, aunque para esto sería la ideal. He utilizado una boquilla lisa redonda similar a esta. 

El aceite para freír ni muy caliente ni muy frío. Si diponéis de termómetro, la temperatura ideal son 170ºC. 

 La masa sobrante la estiramos de nuevo y volvemos a cortarla. Con los últimos restos de masa hice bolas pequeñas (fijaros en la primera imagen)  que están igual de buenas que las bombas y si lo sé hubiese hecho más. Son adictivas.

Las votaciones a los premios Bitácoras 2013 ya van llegando a su fin, quedando tan solo dos recuentos de votos, uno esta semana y otro la que viene así que es necesaria vuestra colaboración para manternos entre los finalistas. Para todos los que no habéis votado, os dejo a continuación la forma de hacerlo:

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